
Como esperaba, la Asics GEL-Nimbus 26 no ha llegado con intenciones de cambio. Si en la anterior Nimbus 25, pudimos apreciar una reformulación completa del modelo (a mejor), para llevar el confort y los acabados a un nivel muy superior del que vimos de la Nimbus 24 hacia atrás, en esta iteración de 2024, los cambios se presentan con discreción, en lo estético y en lo técnico. Ni se puede, ni se deben acometer grandes reformas, especialmente cuando la Nimbus 25 ha demostrado y evidenciado su valía.
Imagen general
La silueta, a simple vista, permanece igual, y tan solo si conocemos en profundidad la Nimbus 25, podremos percibir los cambios en esta Nimbus 26. De no ser así (y si no tenemos un modelo junto al otro), difícilmente sabremos ante qué modelo estamos. Y esto no es malo. Si la Nimbus 25 ofrecía (y ofrece) un rendimiento con elevadas cotas de confort, era razonable no querer meterse en ciertos jardines.

El tejido de la cubierta sigue siendo elástico monocapa. El collar y la lengüeta mantienen la estructura, y donde hay cambios es en la cordonera, donde ahora los cordones, en los cruces centrales pasan a través de unas presillas de gran tamaño en microfibra. Sinceramente, prefiero el sistema más minimalista del modelo anterior, donde además, el cordón (siendo plano) no se ‘entregira’. Me parece más estético, los cordones corren mejor, y el ajuste resulta más sencillo. Se mantiene también el tirador trasero y en la lengüeta, realmente prácticos y útiles para calzarse la zapatilla.
La lengüeta sigue siendo elástica, tirando a fina (aunque suficiente), y permanece en su sitio gracias a la prolongación hasta la base, siendo toda ella de una sola pieza tejida. Técnicamente, es una virguería.

Amortiguación sublime
Como ya pudimos disfrutar en la anterior versión, esta actual Nimbus 26 presenta la espuma más agradable (pensando más en el confort, que en la ‘performance’) de la marca. Ofrece mucho recorrido, no es ‘rebotona’, y la extraordinaria plantilla extraíble interior, de 29 gramos, redondea la sensación de suavidad nada más introducir el pie, y levantarnos. Todo esto, sin comprometer la estabilidad.
Suela mejorada
El compuesto de la suela se mejora, tendremos que confirmarlo con los kilómetros, pero viendo que se ha incorporado el AsicsGrip que conocemos de los modelos de trail running, parece aval suficiente. El patrón en lo que se refiere a corte del caucho, es muy similar, aunque ahora la zona externa, es completa. Con este diseño, de las 3 piezas en la suela de la Nimbus 25, pasamos a 2 en esta Nimbus 26.
El dibujo varía, luciendo ahora unos pequeños tacos alargados en el sentido de la marcha (foto al pie), en lugar de los desconcertantes orificios de la versión anterior. Sumando el nuevo patrón, y el compuesto, parece que definitivamente, vamos a disfrutar de una suela claramente mejorada, por lo menos en tracción y adherencia. En cuanto a la durabilidad, apenas sobresale 2mm. de su cobijo, lo que es todo un hándicap y desafío ante el paso de los kilómetros.

Mismas medidas y precio
Finalmente, se mantienen los perfiles y el drop (de 8 milímetros), además del precio, lo que me parece una buena noticia, teniendo en cuenta que hablamos de un modelo de 200€. Lo que sí ha variado, ha sido el peso, pues en mi número 44’5, ha aumentado 10 gramos. No es para tirarse de los pelos, pero había que decirlo.
En la infografía puedes ver los datos esenciales, tanto en versión de hombre, como de mujer, partiendo de los datos oficiales suministrados por la marca.
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