
SAUCONY Hurricane 24 – Review.
Quizá pensabas que la Hurricane había pasado a mejor vida, o dicho en cristiano, que Saucony se la ‘había cargado’ del catálogo. Pero mira por dónde, va y aparece con su versión número 24. Ésta no la habíamos visto venir…
Es difícil saber la causa de ello. Quizá uno de los motivos, es que no era un proyecto realmente prioritario para la marca. Posiblemente cuando emergía del montón de carpetas de tareas pendientes, se volvía a esconder en el fondo de la pila. Y así ad infinitum.
Y es que como sucede, siempre llegamos a desear aquello que no tenemos a mano, o bien, que no podemos alcanzar. Tampoco es que la tuviésemos continuamente en nuestro pensamiento, no vayamos a volvernos locos, pero si que cuando emergían aquellos recuerdos un tanto borrosos con ruido de aguja de tocadiscos y vinilo de fondo, nos ‘apetecía’ esa eventual nueva Hurricane.
Sea como fuere, y para nuestra sorpresa, Saucony saca el desfibrilador y revive la Hurricane, que llega a su edición número 24 con un aspecto más refinado, actual y elegante Y tiene todo su sentido, como te explicaré. Habrá que darle una merecida oportunidad, ¿no?

Estética y aspecto
Decía líneas más arriba que su aspecto es uno de los puntos interesantes de este modelo, ya que por cierto, se distancia con mucho de su hermana Guide 17 (155€). Justificar y hacer entender ese salto hasta los 180€ de la Hurricane 24, no es fácil. A menos, que per se, quieran posicionarla en un pedestal ‘premium’, como ha hecho deliberadamente Asics con la Kayano 31, que es por ejemplo, su rival a batir.
Con todo esto, ahora podemos tomar parte de lo que ha pretendido la marca, otorgándole ese aspecto astutamente selecto, ya que mirando la zapatilla detenidamente, vemos un esmero en el trato, a la altura del precio, como no podría ser de otra manera. Todo esto, evidentemente, si entrar en materia, porque una vez nos arremangamos y vamos al fondo de la cuestión, todo encaja por sí mismo. Veamos…

Maniobra maestra en la amortiguación
Lo que ha hecho Saucony con la amortiguación de la Hurricane 24 me parece simplemente genial. Y es que para emborrachar nuestros sentidos, ha decidido replicar lo que ya vimos en su día en la Saucony Tempus; esto es, dotar a la Hurricane 24 de uno de sus componentes estrella; nada más y nada menos que el compuesto PWRRUN PB en la parte más cercana al pie, es decir, el mismo del que estamos disfrutando en la Triumph 22, por citar un solo modelo. Este compuesto es el que mayor espacio ocupa en todo el bloque de la mediasuela.
Bien es cierto que para que la Hurricane no se descontrole y pueda presumir de la estabilidad que le presuponemos, se combina con la espuma PWRRUN ‘a secas’ (que es la que encontramos en la Guide 17, por ejemplo), a modo de marco externo, como vimos igualmente en la anteriormente citada Tempus. Si quieres conocer este sistema y combinación de espumas, dale una lectura al artículo de la Saucony Tempus, que analicé aquí.
Este acoplamiento entre ambos materiales, me parece de lo más interesante; ya que ofrece la elasticidad que tanto me gusta de Saucony; respuesta al servicio de un corredor que puede ser corpulento, y que tenemos claro, que en este modelo, los ritmos de desplazamiento van a ser comedidos.
Y es que esta Saucony Hurricane 24 hay que entenderla como un modelo de larga distancia, y ritmos tranquilos, donde buscamos la estabilidad por delante de cualquier otra contemplación.
Si buscas correr a ritmos muy controlados, participar en carreras de larga distancia y por supuesto, prepararlas realizando buenas cargas de kilometraje, esta Hurricane 24 te interesa.

Otra característica interesante es el acusado flare o saliente de la amortiguación respecto al resto de la zapatilla.
Es llamativo como los flancos laterales ‘engullen’ la zona trasera de la zapatilla. En la zona externa-trasera, la espuma alcanza los 60mm. de altura. Una medida, que no es ‘real’. Es decir, acuna el pie, para disfrutar desde la primera puesta de esa sensación de estar ‘ahí dentro’. Es por eso, que la sensación de sujeción es realmente alta.
También la zona trasera sobresale albergando el bisel para facilitar el aterrizaje (de talón) y unas líneas de compresión o acordeón para que la sensación del recorrido de la amortiguación sea mayor.
En mi caso (y esto es totalmente subjetivo), he de decirte que forzando el taloneo, no me llego a encontrar a gusto (en parte por el drop de 6mm. de la zapatilla). He encontrado la comodidad en la pisada aterrizando con toda la zona central. Por tanto, esta Hurricane 24 es perfectamente apta para el corredor que desconoce el término ‘técnica de carrera’.
La altura en la zona de metatarsos se sitúa en los 32mm. hasta los 38 en el talón, resultando en un popular drop de 6mm. Como ves, el amplio volumen que vemos, nada tiene que ver con las medidas reales en términos de amortiguación.
Por otro lado, gracias a la enorme anchura de toda la base de esta zapatilla, sumado a la estructura del chasis como te he comentado, hace que esta Hurricane 24 sea increíblemente estable, sin necesidad de recurrir a piezas rígidas, e inventos varios.
Fíjate que presenta casi 8mm. más de anchura en zona de metatarsos y de arco que una Asics Gel Kayano 31. Si nos vamos al talón, la distancia se reduce sensiblemente, pero seguimos teniendo 5mm. más que una Kayano 31.
Por lo tanto, ese generoso volumen de elementos amortiguantes, con un tacto dulce y respondón, sumado a esa más que notable superficie, es lo que causa que acometer largas distancias, sea únicamente cuestión de proponérselo.
Suela con luces y alguna que otra sombra
Como es habitual en Saucony, esta Hurricane 24 presenta un patrón segmentado y bastante alejado de la estética habitual en la marca. De hecho, tan solo sugiere un ligero parecido en el tercio trasero con la Guide 17.
En este caso, una parte delantera en forma de tenedor unida por la puntera (ver foto abajo) que curiosamente, se apoya en: 1) los laterales sobre el compuesto PWRRUN y 2) la parte central en color naranja en este caso, sobre el PWRRUN PB.
Es en esta parte central donde notamos mayor desempeño en el tándem suela-mediasuela, ya que tanto si impactamos con la zona delantera, como con la central, la fase de transición se encarga de ir comprimiendo ese caucho medial, entre otras cosas, porque la forma de la base está algo ‘abombada’, con lo que parece que además de todo, ganamos unos milímetros extras de recorrido, hasta que llega a nivelarse con los laterales en el momento del impacto-compresión.

La zona trasera, si que presenta ese parecido con la Guide 17, con 2 paneles; el talón externo con una generosa porción de caucho, y el interno más comedido.
Lo que más me preocupa es la zona media de arco (interna), al quedar demasiado expuesta, ya que queda 1 milímetro escaso de falso resguardo frente al resto de la suela, y su grosor de caucho.
Con las primeras salidas ya se veía cómo se las gasta el asfalto, afectando esa zona y de toda la espina dorsal de PWRRUN PB que asoma en esa zona central. Quizá no sea del todo buena idea dejar a su suerte toda esa área, teniendo en cuenta que el usuario ‘tipo’ de esta zapatilla va a ser de peso alto.
En cuanto al apartado de tracción no hay ningún punto criticable, y en lo que respecta a adherencia, el calor que sufrí durante el test, prevaleció sobre el pavimento húmedo, y no digamos ya mojado.
Un upper más funcional que estético
No, este subtítulo no pretende ser un ‘clickbate’. Realmente opino que lo que representa la cubierta de esta zapatilla es más funcional que estético. Con esto no quiero decir que la Hurricane 24 me parezca una zapatilla mediocre en el mejor de los casos, o fea, en el peor de ellos. Simplemente, que valoro más lo que me ofrece en lo pragmático, que lo que veo en el ámbito visual.
Por ejemplo, el mesh puede parecer algo simplón, pero cumple notablemente, ya que ofrece zonas de refuerzo a base de un cambio de grosor en la trama del tejido, y la circulación del aire en la caja de dedos la doy por correcta.
Los acolchados me han encantado, así como el tejido que ejerce de forro, especialmente en la zona de Aquiles, con un mullido que mejora el de su hermana Guide 17. De hecho, me gusta más que el de la todopoderosa Saucony Triumph 22, de la que te hablé aquí.
Otro punto a favor es el de la lengüeta. Y ojo, porque lo normal es que fuese ‘a saco’ con la crítica en este apartado, ya que incomprensiblemente, no va sujeta a los laterales, como sí sucede en la más económica Guide 17, y por supuesto, en los modelos que se sitúan en este rango de precio alto.
Siempre he sido muy crítico con las marcas que racanean este detalle, pero la verdad, con el patrón perfecto que tiene en la base del tibial, el grosor, y el pasador de los cordones, no se desplaza lo más mínimo, por lo que escondo el mazo, pero a medias y a regañadientes.

En el resto de la cubierta, vemos reflectantes termoencolados en la zona de puntera y en el talón, bajo el tirador trasero que nos servirá para calzar la Hurricane 24 más fácilmente. Eso sí, ten en cuenta que si tienes los dedos regordetes, te va a costar hacer uso de ese tirador. ¿Tanto costaba darle 1cm. más de material a la cinta trasera?
La plantilla interior, es uno de los platos fuertes de este modelo. No en vano, he medido en zona de metatarsos hasta 8mm. de grosor, y en su paseo por la báscula, registra nada menos que 39 gramos. Una barbaridad, con lo que quizá puedas imaginar todo lo que ofrece esa plantilla.
Pero aún así, el conjunto, para la cantidad de amortiguación que ofrece y las medidas generosas en todas sus cotas, queda razonablemente ligero; 325 gramos en el pie izquierdo y 316 en el derecho en mi número 44. Una cifra asumible y razonable.
Si tienes que utilizar tu plantilla personalizada si o sí, no deberías tener problema para encajarla, pero te vas a perder una fiesta de sensaciones en forma de mullido sobre la marcha. Y no es por poner el dedo en la llaga, pero es así…

El fit (ajuste o sensación de ello) es confortable. Ten en cuenta, que tenemos en los pies una zapatilla de entreno y larga distancia, en la que el confort, sea en dinámico, corriendo, o simplemente caminando, en el día a día, es elevadísimo.
Esa concesión a la comodidad no es argumento para olvidar el ajuste, que es más que correcto, tanto por lo efectiva que resulta la cordonera y las piezas de TPU encoladas en la zona media, que se encargan de dar estructura. Y es que no podemos perder de vista el uso y usuario de esta zapatilla. Así pues, correcto.
Ya que hablo de la cordonera, no quiero dejar de pasar por alto, que la combinación de ojales tradicionales y pasadores no sería en absoluto criticable, si no fuese porque los 2 cruces centrales (pasadores cosidos a los laterales) hacen que los cordones se apelotonen causando un caos considerable, que al final, dificulta un ajuste que debería ser lo más rápido y simple del mundo. En ocasiones un diseño desatinado, acaba por causar un lío morrocotudo.
Conclusión
La Saucony Hurricane 24 reaparece y lo hace con la seguridad de quien ha visto pasar los toros tras la barrera, ha estudiado, aprendido, tomado nota de la competencia, para posicionar su zapatilla de estabilidad y máxima amortiguación para larga distancia, en lugar privilegiado, pues aventaja a su rival más directa (la Asics Gel Kayano 31) en peso, amortiguación, y precio, librando a nuestra tarjeta de crédito de un dispendio de 20€ de más que a la hora de adquirir la Hurricane 24.

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