A las 11 de la mañana y con cielo despejado y 26 grados de temperatura, la población Suiza de Sierre, daba la salida a una carrera emblemática. Una competición con solera, nada menos que 51 años de historia.
Y una carrera con un final histórico, firmado por Kilian Jornet, que eso si, ha tenido que emplearse a fondo, para ganar…..’por los pelos’ frente a unos finísimos corredores africanos, que llegan al trail running con ambición, y sed de victorias. Así ha sido la cosa.
Kilian Jornet ha empleado la misma táctica que en la Zegama Aizkorri; salir disparado para poner tierra de por media cuanto antes. Más aún, teniendo en cuenta, que esta carrera es rápida, de ‘tal solo’ 31kms. y unos 2000 metros de desnivel positivo.
La carrera empieza en subida, aumentando el desnivel paulatinamente, primero en tramo fácil, para después complicarse con piedras y raíces. En el km. 8, avituallamiento de Ponchette, entra primero Kilian seguido de Josphat Kiprotich (Kenia), que aprovecha la bajada de ritmo de Kilian en el espacio del avituallamiento para beber, y lo adelanta.
A partir de aquí, se iniciará un tira y afloja durante varios minutos. Jornet no está dispuesto a perder su liderato, pero el keniano tampoco da su brazo a torcer, por lo que los ataques se suceden contínuamente. La cabezonería de Kiprotich, le hace ganar unos valiosos metros, que Josphat aprovecha para lanzarse casi a 21km./h en un tramo de pisa ancha con tendencia a bajar, que le sirven para entrar primero en el avituallamiento de Chandouin con su propio bidón de hidratación en la mano.
En este punto el keniano le lleva 33 segundos de ventaja al español.
Josphat seguía apretando en el tramo en tobogán llegando al kilómetro 16 con 45 segundos de ventaja sobre Jornet. El suizo Remi Bonet ya se descolgaba en más de 2 minutos. Esta carrera parece que siempre se le acaba atragantando.
Llegamos al km20, Hotel Weisshorn, y Kilian vuelve a tomar la delantera. El extratearrestre se conoce como nadie. Va a la suya, no se fija quien corre a su lado, si le adelanta o si se le escapa. Hace su carrera, se conoce sus ritmos, sus pulsaciones y estudia sus sensaciones, pero ojo, que no deja nada a la suerte. Todo y que el calor no es su mejor aliado, se dispone a apretar para cubrir las últimas subidas, buscando el techo de la carrera, a 2424mts. para lanzarse ya cuesta abajo hasta Zinal.
A partir del km. 24, la zancada de Josphat no es tan larga, tan alegre. Es posible que el ritmo entre el 18 y 22 haya sido demasiado alto, pero sin duda, ya no se le ve tan ‘suelto’.
Mientras, Jornet, a la suya…..a un ritmo constante y sólido.
La sorpresa vino a las 2h. 2 minutos de carrera, cuando en un estrecho sendero, Patrick Kipngeno aparece en escena, descolgándose de Remi Bonet y adelanta a Josphat, que definitivamente, pincha. Se ha desfondado. Ha pagado el ritmo infernal de los primeros kilómetros.
A 6 kilómetros de meta, con un sendero que empieza a complicarse y llenarse de piedras Kilian demuestra su técnica y danza en zonas más técnicas.
Por si fuese poco, entra en escena Philemon Kiriago, que saca fuerzas en el kilómetro 26, y se lanza a tumba abierta a la caza de Kilian, que mantiene la primera posición, a tan solo 25 segundos por delante. Nada, un suspiro…Y es que lo tiene a Kilian a tiro, casi le oye respirar.
En el descenso, a poco más e 2kms. de meta Philemon lo rebasa, parece que Kilian se distancia, pero en un viraje a izquierdas estudiando un árbol tan bien colocado que le viene al pelo, el español ve el hueco y se cuela, como en la Fórmula 1. A partir de ahí, el maestro de las montañas sube una marcha y demuestra su maestría cuesta abajo. Pero ojo, que no le saca más de 30 metros al de Kenia.
Ya en la entrada a Zinal, sobre el asfalto los últimos metros son de infarto. Philemon demuestra su altísimo ritmo en llano, y empieza a recortar. Meta y alfombra a la vista. Kilian la cruza primero……a 1 segundo y medio. Una locura.
Tiempo final en meta: 2h. 25m. 34s. O lo que es lo mismo, Kilian mejora su récord por 8 décimas. Y por cierto, suma su 10ª victoria en Sierre Zinal. La tercera posición, a 1 minuto y 23 segundos, Patrick Kipngeno.
Carrera femenina con menos sobresaltos
En cuanto a las chicas, la cosa no ha estado tan emocionante. El orden ha ido cambiando, pero sin tanto estira-y-afloja. Joyline Chepngeno parecía tomar la delantera y era Joyce Muthoni y Scout Adkin (Inglaterra) las que se peleaban. Joyline descendía bien, a más de 16kms./h., y no tuvo demasiadas dificultades para llegar a meta con más de 8 minutos de ventaja sobre su perseguidora, Scout Adkin. La rumana Monica Madalina se subiría al tercer cajón del podio, a más de 10 minutos de la vencedora.
