Los corredores cometemos errores a lo largo de la temporada y de los años. Algunos pasan rápido y se quedan en el pasado, otros nos pueden llegar a lastrar en los próximos meses. ¿Cuáles son los errores más comunes de los corredores? Veámoslo.
Hacer demasiadas carreras a la misma velocidad
Si quieres mejorar tu carrera, deberías intentar incorporar al menos 2 días intensos en tu entrenamiento semanal. En estos días necesitas concentrarte en la mente, enfocarte y dar lo mejor de ti. Un buen ejemplo de días intensos podría ser una sesión de pista/series, un ritmo, fartlek, sesiones en montaña/con cuestas o entrenamientos estructurados dentro de tu carrera más larga. Cuando sales de tu zona de confort y es cuando ocurre la magia.
Sin embargo, esto significa que en los otros días deberías tomarlo con más calma, permitiendo que tu cuerpo se recupere y tus músculos se regeneren. Forzar demasiado en estos días más fáciles te dejará fatigado y es uno de los errores más comunes de los corredores. Esto te impedirá alcanzar tu máximo potencial. Estos días de carrera de mantenimiento deberían representar aproximadamente el 75-80% de tu entrenamiento semanal.
No entrenar la fuerza y el acondicionamiento
Como corredores, todos queremos correr. Esto a menudo significa que descuidamos sesiones cruciales que complementan la carrera, como la fuerza y el acondicionamiento.
Mantener y desarrollar músculo es una parte clave para evitar lesiones. Si solo te concentras en correr y descuidas tus áreas más débiles, es probable que llegue un momento en que algo «ceda» y tu entrenamiento se vuelva insostenible. A menudo, se necesita una lesión para que nos demos cuenta de esto, así que no tientes al destino y no lo dejes para demasiado tarde.
Aumentar la velocidad, la calidad del volumen y la distancia demasiado pronto
Tu cuerpo puede tardar un tiempo en adaptarse a las mejoras en tu carrera. Esto es algo que no sucede de la noche a la mañana.
Conseguir más velocidad y tiempos más rápidos es gratificante cuando lo has trabajado. Debemos entrenar de manera inteligente y no dejarnos llevar. No conviene aumentar el volumen o la calidad de tu entrenamiento o la distancia en más del 10% de la semana anterior. Esto te dará la mejor oportunidad de seguir siendo productivo y reducirá tus posibilidades de lesionarte.
No entrenar con la nutrición y la suplementación
Otro de los errores más comunes entre corredores. Cuando llega el día de la carrera, nunca querrás probar algo nuevo. Corres el riesgo de que te siente mal y tire al traste semanas de entrenamiento.
No olvides probar todo con suficiente antelación para saber si te sienta bien o no y los beneficios que tendrás en carrera y después.
Obsesionarse con las redes sociales
Vivimos en una época en la que muchas de las cosas que hacemos, incluida la carrera, acaban en las redes sociales. Es fácil ser manipulado viendo a atletas correr con una forma casi perfecta en Instagram o YouTube y dejar que eso te desanime.
En lugar de verlo de esa manera, ¡impón tu estilo! Todos tenemos estilos y formas de correr diferentes. De hecho, muy pocos de nosotros estamos contentos con la forma en que corremos. No dejes que eso te desvíe de entrenar duro y ser lo mejor posible.
También es fácil caer en la trampa de correr tus carreras fáciles más rápido porque te preocupa lo que otros corredores puedan ver en tu Strava. Es mejor correr con la mentalidad de que cuanto más fácil hagas tus carreras de recuperación, más fresco y rápido serás en tus días difíciles. En última instancia, esto significa que tu entrenamiento será productivo y es más probable que alcances los objetivos que te has propuesto.
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