Brooks Hyperion. La simplicidad de volar sobre el asfalto

Juan González
14/09/2023

Si buscas una zapatilla de entranamiento/competición y valoras la simplicidad, obtenerla a un precio razonable, y la fiebre de la placa de carbono tampoco va demasiado contigo, puedes tener ante ti, una zapatilla realmente interesante.

Cierto es, que para que pueda convertirse en una opción coherente, se han de dar una serie de condiciones; primero para que no te decepcione, y segundo, para que puedas sacarle partido y disfrutar de ellas. Te lo explico rápidamente y al punto.

Temperamental

Brooks anuncia que la Hyperion es zapatilla más ligera del catálogo (exceptuando los modelos de atletismo, o clavos). Para lograr esta ligereza de ha optado por utilizar una de sus espumas más punteras, el DNA Flash, que ya hemos podido probar en modelos como la Catamount (1 y 2) de montaña o la Hyperion Elite. En ambos modelos, he podido disfrutar de la sensación de ligereza, y peculiar rebote.

Por otro lado, la cubierta o upper, presenta unas líneas simplistas y sin elementos innecesarios. Todo suma (o resta) para contener el peso. Especial mención merece la lengüeta, totalmente minimalista con buen patrón y longitud con un sistema de sujeción a los laterales muy acorde al resto de la zapatilla. Sencillo y efectivo. Los cordones planos, colaboran en el buen ajuste, y sorprende la configuración de 6 ojales más adicional, que es absolutamente innecesario, porque sin esfuerzo alguno, ajustando correctamente los 6 cruces, el pie queda total y perfectamente sujeto.

Brooks Hyperion. La simplicidad de volar sobre el asfalto — Brooks Hyperion. La espuma del collar es casi perfecta, en densidad y grosor

Por último, y en lo que a componentes se refiere, la suela me ha sorprendido (por la propia filosofía de la zapatilla), ya que tenemos un generoso grosor máximo de 3mm. El caucho se divide en 3 zonas: parte delantera (completa) y talón izquierdo y derecho (dividido) con un surco medio que en la fase de aterrizaje, facilitará la «expansión» de la mediasuela, ganando unos milímetros en superficie de rozamiento. Así pues, tenemos una zona de talón externo con más superficie. Lógico, entendiendo que es la zona «habitual» de aterrizaje para un elevado porcentaje de corredores, si bien es cierto, que para disfrutar de esta zapatilla, lo conveniente (no imprescindible, pero sí conveniente) es tener una buena técnica de carrera.

Con este grosor y patrón de suela, concluyo que la durabilidad de la zapatilla, si pensamos en kilómetros útiles, va a ser muy elevado, teniendo también en cuenta, que gracias a esos 3mm. máximos, la espuma que queda al descubierto, permanece protegida.

Velocidad para entreno y competición

Escogería la Hyperion sin dudarlo, si tuviese una competición de hasta medio maratón y buscase mejorar mi tiempo, que debería (idealmente) estar por debajo de 1h. 30m. Aunque honestamente, también me parece apta para entrenos incluso largos, entendiendo que el ritmo va a ser alegre. Si no es así, dentro del catálogo de Brooks tenemos alternativas más adecuadas.

Si hablamos de maratón, la cosa habría que pensarla más detenidamente, y consideraría llevarla si mis tiempos están holgadamente por debajo de las 2h. 50m.

Me parece buena opción como zapatilla única para el usuario ligero, que se mueve a buen ritmo, y con buena técnica. Para el corredor o corredora que ni le gusta, ni necesita modelos excesivamente amortiguados, y para el que lo esencial son las sensaciones percibidas y el bajo peso.

Es agradable tener la sensación de rapidez que da la Hyperion, siendo conscientes de que ese ágil movimiento no implica el impulso de ningún tipo de palanca, en forma de placa, sea cual sea el material.

Por otro lado, cuando hemos llegado a normalizar el precio de las zapatillas y hablamos de cantidades elevadas con cierto desparpajo, la posibilidad de adquirir esta Hyperion por 150€, me parece cuanto menos, interesante.