El turrón, un clásico dulce navideño, podría parecer una opción poco convencional como barrita energética para corredores, pero tiene ciertas características que lo convierten en una alternativa interesante. Este alimento, elaborado principalmente a base de almendra, miel, azúcar y claras de huevo (en el caso del turrón duro), o con añadidos como chocolate y frutos secos (en versiones más modernas), es rico en nutrientes que pueden beneficiar a los deportistas.
Fuente de energía rápida
El turrón destaca por su elevado contenido en hidratos de carbono simples, provenientes del azúcar y la miel. Estos carbohidratos son una fuente de energía de rápida asimilación, ideal para consumir antes o durante un entrenamiento o carrera de larga distancia. Un pequeño trozo de turrón podría aportar el impulso necesario para mantener el ritmo en momentos de desgaste energético.
Grasas saludables y proteínas
Gracias a las almendras, el turrón también contiene grasas saludables y una cantidad moderada de proteínas. Las grasas aportan energía sostenida, mientras que las proteínas contribuyen a la recuperación muscular. Esto es especialmente relevante en modalidades de larga distancia, donde el cuerpo necesita recurrir a diferentes fuentes de combustible.
¿Cuándo y cómo consumirlo?
El turrón puede ser útil en sesiones de entrenamiento o carreras largas. Pero debe consumirse en pequeñas cantidades debido a su densidad calórica y contenido de azúcar. Optar por variedades más naturales, como el turrón duro o blando de calidad artesanal, puede ser una mejor opción frente a versiones industrializadas con ingredientes artificiales.
¿Es bueno el turrón como barrita energética?
Aunque el turrón puede actuar como un snack energético en situaciones puntuales, no debe sustituir a opciones diseñadas específicamente para deportistas, como geles o barritas energéticas. Sin embargo, es una alternativa válida si buscas un alimento más natural y sabroso, especialmente en épocas navideñas.
En definitiva, el turrón puede ser un aliado ocasional para los corredores. Pero siempre que se consuma con moderación y como parte de una dieta equilibrada. Así, no solo sumarás energía, sino también un toque dulce que alegrará cualquier jornada de entrenamiento.